ARTICULO: El perro no es el mejor amigo del hombre

POR: ANIBAL CORCINO M. ABOGADO

Vive en Sánchez Provincia Samaná.

 

         Por muchos años he escuchado la frase “El perro es el mejor amigo del hombre” y esto siempre me llamó la atención. Me preguntaba ¿Qué tiene el hombre para que el perro le elija como su gran amigo y le regale tanta fidelidad? ¿Es acaso el perro un ser superior capaz de saber de humanos más que el humano en sí? ¿Puede el perro ver las virtudes que los humanos no ven en sí mismo o es el perro el que posee las cualidades que hacen que el ser humano lo vea como su mejor amigo? Muchas son las inquietudes y quizás muchas las respuestas, pero solo una sola me logró convencer y ayudó a entender, que el perro no es el mejor amigo del hombre.  

Dentro del mundo animal existen muchas variedades, pero las características de cada uno lo convierten en domables, mascotas o reos del ser humano. Otros simplemente no pueden ser parte del hogar por su características agresivas y violentas. Estas características los convierten en dependientes o independientes.

Dentro de los independientes podemos agregar a todos aquellos animales que   son capaces de sostenerse por sí solos, que   pueden buscar su comida y cazar por su propia cuenta, tales como el ratón, el león, las aves, y el más famoso de todos los domésticos que es el gato. El gato es un animal independiente, no tiene ningún apego al ser humano, puede dar cariño, acercarse, pero no es el animal fiel y generoso que es el perro y se puede ausentar por semanas sin que le importe mucho su dueño.

Por otro lado, existen los animales dependientes, dentro de los cuales podemos mencionar, al hombre y al perro. El hombre tiene dependencia de su entorno, es por medio de su hábitat y hermandad que aprende a sobrevivir y a diferencia del mosquito, requiere de ser sostenido durante los primeros años de su nacimiento. Es de esa dependencia que nace cierto apego, cariño y amor a las personas que los cuidaron, que le dieron ese nido y le permitieron llamarlos Papá o Mamá.

 En ese sentido el perro conociéndose a sí mismo, como un animal dependiente, busca lograr el cariño y el acercamiento de aquel que le alimenta y le sostiene. Porque es por medio de esta relación tan personal y real que el perro logra todos los días las mejores atenciones de su dueño, de su gran amigo y cuidador. Él sabe, que, de no ser así, nadie se afanaría tanto en cuidar a un animal que solo tienen amor por sí mismo y que no le importa aquel que le alimenta.

En tal sentido, si el perro depende del humano para sobrevivir y el humano de alguna manera debe cuidar y alimentar al perro porque él mentalmente depende del humano, más el hombre no depende del perro, y es por medio de este cuido y buen trato que el perro le ofrece su lealtad y amistad, lo cual luego se hace recíproco para ambas partes.

En tanto, creo, que el perro es más sabio que amigo y no es el mejor amigo del hombre, el hombre es el mejor amigo del perro. Es el hombre que, por esa lealtad, ese cariño, esa atención y ese amor incondicional que le da al perro, recibe todo lo que obtiene de él.

Esto aplica de igual manera al ser humano, con unas diferencias muy puntuales. El perro es realmente fiel, el perro es realmente leal, el perro es consciente de lo que es ser agradecido y por ello su fidelidad es mayor. El perro da amor y lo expresa con cariño similar al que recibe, da atención y es agradable el espectáculo de su recibimiento con el movimiento de su cola derritiendo hasta el corazón más duro, el perro conoce la lealtad. 

 Es por ello que cada día me esfuerzo más en ser como el perro sin dejar de entender que en esta selva también existen los gatos, las aves, las serpientes y los lobos a quienes le puedes dar todo y nunca imitaran a un perro. “Elige bien a los amigos y siempre que pueda sé cómo el perro, puede ser la mejor decisión para lograr esas metas pendientes.”